DE LAS 4 Ps DEL MARKETING TRADICIONAL A LAS 5 Cs DEL MARKETING MODERNO

DE LAS 4 Ps DEL MARKETING TRADICIONAL A LAS 5 Cs DEL MARKETING MODERNO

Desde los años 60 del siglo pasado, se ha venido considerando que los cuatro elementos básicos del marketing eran las denominadas 4 P, que eran capaces de explicar por si solas el funcionamiento del mundo del marketing. ¿Cuáles eran esos cuatro elementos casi mágicos?

 

Producto

Se trata del elemento principal de cualquier campaña de marketing, el elemento sobre el que giran todas las estrategias. Es un concepto amplio que abarca todo lo que se coloca en el mercado para su adquisición y que, de una u otra manera, satisface las necesidades del consumidor, aunque no tiene que ser algo tangible. Eso sí, antes de embarcarse en una estrategia de marketing, es necesario definir lo mejor posible el producto, respondiendo a las preguntas de qué es lo que se vende, qué necesidades satisface el producto y cuáles son sus características.

 

Precio

Aunque el concepto es muy sencillo, ya que se trata de la cantidad de dinero que el consumidor debe pagar para obtener un determinado producto o servicio, la dificultad estriba en fijar cuál es el adecuado, llegando a ser una de las cuestiones más complicadas pero también más importantes de una campaña. Para fijar el precio adecuado es necesario realizar estudios de mercado que permitan averiguar lo que los consumidores están dispuestos a pagar, estudiar los precios de la competencia para productos similares y analizar si el factor precio puede significar una ventaja competitiva en el mercado.

 

Punto de Venta

Entendido como el proceso por el que el producto llega al cliente. Es importante no solo por el margen de ganancia que va a proporcionar sino también por la satisfacción del consumidor. Dentro de este proceso, hay varias variables a considerar: almacenamiento, transporte, coste de envíos, tiempos de operación, etc.

 

Promoción

Se trata de las técnicas, medios y canales que se usan para dar a conocer el producto. Desde los medios tradicionales como anuncios de radio y televisión, exteriores, etc. hasta las nuevas estrategias de inbound marketing, basadas en contenidos elaborados y con valor añadido para los clientes. Sean cuales sean los medios empleados, es necesario valorar las diferentes posibilidades y seleccionar la mejor manera de llegar al público objetivo que nos hayamos definido.

EL PASO A LAS 5 Cs

Durante años, las 4 Ps que hemos visto, bastaban para tener una visión panorámica de lo que se quería abarcar, así como para elaborar una lista de acciones y estudios a realizar antes de lanzar al mercado un nuevo producto o servicio.

Sin embargo, en la actualidad, vivimos una de las etapas más dinámicas del marketing, caracterizada por el empoderamiento del consumidor, la omnicanalidad y la entrada de nuevas tecnologías. Y en este contexto la innovación es un elemento clave para posicionarse en el mercado. No cabe duda de que la presión en los precios es cada vez mayor, por lo que la mejor forma de contrarrestarla es precisamente centrarse en innovar el producto o servicio que se ofrece, así como en desarrollar estrategias que se adapten al entorno actual. Y en este contexto es precisamente donde nacen las 5 Cs del marketing actual.

 

Cliente

Vivimos en la era del empoderamiento del consumidor, el cliente es el centro y cualquier acción o estrategia gira alrededor de él. Es importante disponer de una imagen lo más precisa posible de las personas, de sus necesidades, estilos de vida y expectativas para poder ofrecerles lo que realmente demandan. Es el paso del marketing masivo a la personalización.

 

Conexión

En el mundo digital en el que vivimos, en el que todo está conectado, es necesario pensar en una estrategia global, considerando los diferentes impactos que le van a llegar al cliente y además adaptando cada uno de ellos al soporte en el que el consumidor lo va a recibir.

 

Comunidad

Ya no sólo valen los productos y servicios. Hoy en día es necesario construir una imagen de marca. Los consumidores quieren compartir ideas y puntos de vista con las marcas, de forma que no sólo se trata de cubrir una necesidad con el producto elegido. A la hora de llevar a cabo la decisión de compra, el consumidor quiere de alguna manera apoyar la imagen que proyecta esa marca. De esta forma hoy en día, valores como confianza o transparencia son fundamentales para lograr una conexión con los consumidores.

 

Conversación

La conversación con el consumidor, el entender cuáles son sus necesidades y expectativas es fundamental para poder satisfacer sus necesidades, de forma que ésta ha pasado a ser una nueva fuente de innovación para las marcas.

 

Contenido

Generar contenido es importante y está de moda, pero no se trata de generar la información que desee la marca para dar a conocer y publicitar sus productos, sino de proporcionar a los consumidores temas e informaciones que sean de su interés, de forma que tengan el sentimiento de que la marca les está proporcionando valor.

¿HAY UN MARKETING PARA HOMBRES Y OTRO PARA MUJERES?

¿HAY UN MARKETING PARA HOMBRES Y OTRO PARA MUJERES?

No cabe duda de que el mundo ha cambiado mucho en los últimos años y el marketing no se ha quedado atrás. Tanto los cambios culturales, como las exigencias de mercado, han hecho que el marketing tome rumbos diferentes.

Hasta hace no mucho tiempo, las decisiones de compra, así como los productos que se ofrecían y las estrategias para comercializarlos estaban dirigidos a segmentos de mercado que no estaban comunicados entre sí y que no recibían una saturación de comunicaciones como la actual. Sin embargo, hoy en día todo eso ha cambiado, la sociedad está sometida a un bombardeo de comunicaciones que hace que, si se quiere tener una ventaja competitiva, sea necesario diferenciarse y de hecho, los medios de comunicación ya se están orientando en esa línea.

Tradicionalmente, uno de los puntos clave del marketing ha sido la segmentación de mercados y la definición del público objetivo al que se deseaba llegar con una determinada campaña. Así los mercados se dividían dependiendo de las variables de segmentación elegidas. Eso sí, para la mayoría de las campañas y productos, no se consideraba que los géneros fueran una de las variables a seleccionar.

Sin embargo, hoy en día, y con la diferenciación de la marca en el punto de mira, se están desarrollando estrategias y tácticas que permitan dirigirse a hombres y mujeres de forma diferente ya que, no sólo tienen formas distintas de actuar, sino también de tomar decisiones en el momento de la compra. De igual forma, las características de los productos que demandan son diferentes y surge la necesidad de apostar por estrategias más personalizadas que permitan llegar de manera más efectiva a ambos géneros.

 

CUÁLES SON LAS DIFERENCIAS

En primer lugar, es importante considerar que, dado que los hombres y las mujeres asumen conductas diferentes, es necesario realizar estudios de mercado tanto online como offline en los que se investigue con mayor precisión los gustos, deseos, preferencias o costumbres de los segmentos masculinos y femeninos. De esta forma, se podrán diseñar estrategias enfocadas en cada uno por separado, con los diseños, colores o envases que mejor se adapten. Cuanto mejor conozcamos a nuestros consumidores, más fácil será conectar con ellos y generar experiencias y emociones de marca.

Y es que la realidad es que hombres y mujeres son diferentes y compran de forma distinta. Esto es algo que no se puede olvidar a la hora de tomar decisiones sobre lo que se ofrece al mercado y de qué manera. Las mujeres suelen ser más expresivas, verbalizan sus sentimientos y emociones. Por el contrario, los hombres no suelen expresar verbalmente sus emociones, no suelen llorar y muchas veces resuelven los temas de forma más activa. Son dos tipos diferentes de cerebros que influyen en la forma de percibir la realidad y de actuar.

 

MARKETING DE GÉNERO

Una de las evoluciones del marketing actual es el paso de una segmentación, a lo que podríamos llamar una micro segmentación. Y en este nuevo concepto de micro segmentación no se puede dejar fuera la diferenciación por género, lo que lleva a replantear las estrategias del marketing tanto tradicional como digital.

En la sociedad actual, el sexo femenino es un mercado altamente demandante de productos. Las mujeres buscan y tienen más información sobre lo que desean adquirir antes de realizar la compra. Además, son las primeras en emitir comentarios, tanto positivos como negativos, sobre las marcas y los productos. Es necesario plantear nuevas estrategias que sean más afectivas y emocionales.

Por el contrario, en el caso del género masculino es necesario ser más directos y precisos, generando experiencias con los productos y marcas que sean más racionales.

De ahí que, para un mismo producto, que cubra la misma necesidad, será necesario crear dos estrategias de diseño y comunicación. En este sentido se puede hablar de marketing para mujeres y marketing para hombres.