COMO CONSEGUIR UN SLOGAN DE ÉXITO
El slogan o
lema publicitario es una frase corta y
concisa cuya finalidad es reforzar
la publicidad de una determinada marca, ayudando a diferenciarla de la competencia y a buscar su posicionamiento en la mente del consumidor.
Generalmente el
slogan incluye uno o más atributos o beneficios de la marca que se quieren
resaltar y fijar en la mente de los consumidores. Por ejemplo, si el slogan
destaca que la marca se posiciona en productos de bajo precio y buena calidad,
y tiene un buen impacto, cuando el consumidor busque un producto con esos
atributos de precio y calidad pensará en la marca del slogan, lo que favorecerá
la compra.
En otros casos, el
slogan, en lugar de incluir atributos o beneficios, transmite la idea o estilo de negocio, la personalidad de la marca,
etc.
En cualquiera de los casos, una pregunta clave que se
ha planteado tradicionalmente en publicidad es qué tiene que tener un slogan para triunfar y conseguir que sea
repetido y recordado por los consumidores.
A título personal todos hemos memorizado en alguna
ocasión alguna frase pegadiza que una marca ha popularizado. E incluso, algunas
de ellas se han integrado en el lenguaje popular y se han convertido en
muletillas, en frases hechas que se emplean en conversaciones habituales. Este
hecho, que hace algún tiempo era bastante más común con frases como “busque,
compare y si encuentra algo mejor, cómprelo” o “vuelve a casa por Navidad”, hoy
en día resulta ligeramente más complicado por el gran número de impactos
publicitarios que se reciben diariamente. De cualquier forma, los slogans siguen siendo bastante
efectivos y las marcas no deben descuidarlos a la hora de elaborar su
estrategia.
¿QUÉ HACE QUE UN
SLOGAN CONECTE CON LOS CONSUMIDORES?
Aunque no existe una receta mágica que haga que el
slogan conecte con los consumidores, se puede decir que sí que es necesario que
se den dos condiciones. Por una parte, hay que encontrar las palabras que consigan captar la idea que se desea y, por otra parte, esas palabras
tienen que ser memorables, se tienen que fijar fácilmente en la memoria de
los consumidores y además conservarse.
Construir el slogan no es fácil. Aunque aparentemente
puede dar la impresión de que se trata de una frase afortunada creada en un
momento de inspiración, la realidad es que detrás de ella hay un trabajo
importante para definir qué es lo relevante y lo que debe estar presente en el
slogan.
Hay varios elementos
clave comunes a todos los slogans de éxito:
·
Diferenciador: el slogan debe contar con uno o más atributos o beneficios que queramos
resaltar y que sean asociados con nuestra marca. Para ello debemos tener en
cuenta las características de nuestro público objetivo y asegurarnos que los
atributos elegidos no estén ya asociados a marcas de la competencia, de forma
que podamos diferenciarnos y distinguirnos. No cabe duda de que el slogan de la marca tiene que ser
distinto al de la competencia y no sólo en cuanto a que use palabras
diferentes, sino también en hacer que los consumidores vean lo que la marca
tiene de diferenciador, lo que puede aportarles que sea único. Es decir, el
slogan debe funcionar como herramienta para llamar la atención sobre aquellas cosas que hacen que la marca sea única.
·
Corto, claro y conciso: el slogan debe ser capaz de transmitir una idea en pocas palabras. Ser breve y sucinto. Para
que un slogan tenga éxito debe ser
pegadizo y fácil de recordar. Es lo que tradicionalmente se ha hecho en los
estribillos de las canciones de verano. No se puede esperar que los
consumidores hagan un esfuerzo para memorizar lo que las marcas quieren
comunicar, sino precisamente lo contrario, hay que facilitarles el trabajo.
·
Original, ingenioso y pegadizo: el slogan debe ser capaz de impactar al consumidor y posicionarse en su mente de forma
duradera. Para conseguirlo se puede recurrir a juegos de palabras, rimas,
silogismos, etc.
·
Incentivador: no cabe duda de que el slogan es un ingrediente más, que las marcas utilizan
para impulsar las ventas y que, por tanto, forma parte de la estrategia de
marketing. De ahí que no sea suficiente con que se trate de una frase pegadiza,
sino que tiene que servir para que el
consumidor se sienta más atraído por la marca y consuma el producto, por lo
que debe resaltar los elementos
positivos y los beneficios que el consumidor puede obtener.
Y una vez creado un slogan con todos estos elementos,
es necesario que sea escuchado y leído por los consumidores. Para ello, además
de ponerlo como parte de nuestro logo, debemos incluirlo en todos los medios
publicitarios que utilicemos, por ejemplo, radio, televisión, vallas, folletos,
etc.
ALGUNOS SLOGANS
POPULARES
Por último, veamos algunos slogans que se han
convertido en conocidos y repetidos a lo largo de la historia:
Tecnología:
·
Nokia: “Connecting people”.
·
Movistar: “Compartida la vida es más”.
·
Apple: “Think different”.
Deporte:
·
Nike: “Just do it”.
·
Adidas: “Impossible is nothing”.
Automóviles:
·
Mercedes-Benz: “Lo mejor o nada”.
·
BMW: “Te gusta conducir”.
Alimentación:
·
McDonalds: “I’m loving
it”.
·
Coca-Cola: “La chispa de la vida”.
·
Red Bull: “Red Bull te da alas”.
·
El Almendro: “Vuelve a casa por Navidad”.
Otros:
·
Viceroy: “No es lo que tengo, es lo que soy”.
·
L’Oreal: “Porque yo lo valgo”.
·
Ikea: “Bienvenido a la república independiente de mi
casa”.
·
Mastercard: “Hay cosas que el dinero no puede comprar… para todo
lo demás Mastercard”.
·
DGT: “Si bebes no conduzcas”.