NEUROCIENCIA Y MARKETING DE CONTENIDOS. PARTE 2
En el post anterior, vimos una de las aportaciones que
la neurociencia ha realizado al marketing de contenidos, explicando algunas
herramientas que facilitan la labor de conseguir que los consumidores cliquen en los mensajes publicitarios deseados. Y
no sólo eso, sino también conseguir que los mensajes capten su atención y permanezcan en sus recuerdos.
Aunque no cabe duda de que esto es importante, otro
objetivo que todas las marcas se fijan es difundir su mensaje al mayor número
de personas posibles. De ahí la importancia de conseguir que nuestros contenidos sean compartidos.
En este punto también la neurociencia puede ayudarnos. ¿Qué hace que los consumidores
compartan unos contenidos y no otros, con sus amigos y conocidos?. ¿Es lógica o
emoción?. En este caso, hay que olvidarse de métricas y centrarse en la psicología, que puede ayudarnos a entenderlo. Es la
extraña naturaleza del cerebro la que hace que sintamos una urgente necesidad de
pasar un vídeo o debatir sobre el color de un vestido y está claro qué es lo
que la guía. Se trata de la emoción.
Y si queremos que nuestro contenido sea compartido de
forma regular, el primer paso necesario es entender porqué se comparte el contenido. De esta forma podremos intentar
seleccionar contenidos y adaptarlos, de manera que sean mejor recibidos por los
consumidores y aumente la probabilidad de que sean compartidos.
Veamos algunos puntos que podrán ayudarnos.
RAZONES POR LAS QUE SE
COMPARTEN CONTENIDOS
·
Ser útiles a amigos y conocidos.
En un estudio realizado en la Universidad de
California, se pudo comprobar por primera vez, las zonas del cerebro asociadas con ideas que deseamos compartir.
El resultado fue muy interesante. La zona
que se activaba en el cerebro cuando los usuarios compartían contenidos, era la
asociada a la utilidad. Las personas quieren ser útiles a sus amigos y
conocidos y para ello, el cerebro escoge
compartir los contenidos que considera que tienen una utilidad para los demás,
ya sea porque les va a producir diversión, interés o porque puede ayudarles de
alguna otra manera.
·
Fomentar las relaciones.
Otra de las razones por las que se comparten
contenidos es el fomento de las
relaciones sociales. Si hace mucho tiempo fueron las cartas y posteriormente
se sustituyeron por el teléfono o los mensajes, hoy en día son las redes sociales el nuevo medio de fomento de
las relaciones personales.
Cuando vemos o leemos algún contenido, si el tema
tiene relación con las aficiones, gustos, etc. de alguno de nuestros amigos,
conocidos o familiares, inmediatamente pensamos
en ellos, sentimos una conexión y tenemos la necesidad de compartir lo que
hemos visto, para mantener la relación.
·
Expresar quien somos realmente (o quienes queremos
ser)
Estudios psicológicos han demostrado que existe una
discrepancia entre lo que somos y lo que nos gustaría ser. Cuando miramos al
futuro, hay 3 proyecciones diferentes de nuestro yo: lo que nos gustaría llegar
a ser, lo que podemos llegar a ser y lo que tenemos miedo de llegar a ser. Todo lo que tiene que ver con la primera
proyección, es decir con lo que nos
gustaría llegar a ser, es lo que compartimos en redes sociales.
Realmente, que esta versión idealizada de nosotros mismos,
y de nuestra proyección a futuro, sea más o menos real, es irrelevante. Dibujamos en nuestra mente nuestro ser
ideal y compartimos lo que tiene que ver con él. De ahí que muchos internautas
compartan historias de éxito de personas como las que ellos querrían ser en el
futuro.
·
Sentirse implicado con una marca
Otra razón por la que las personas comparten
contenidos es porque se sienten implicados con una determinada marca y esto
puede deberse a varios motivos:
-
Las
características del producto. La experiencia es tan buena, única o nueva
que tiene que ser compartida.
-
El mensaje que la marca transmite, que puede ser tan bueno, divertido o brillante que
queremos compartirlo
-
La utilidad de los productos o servicios que ofrece. Este punto está relacionado con la razón de ser
útiles a amigos o conocidos que hemos visto anteriormente.
-
La necesidad de ganar protagonismo ante nuestros
conocidos, mostrando que somos parte de
un club exclusivo de compradores o que tenemos información que los demás no
tienen.
·
Altruismo
Por último, una de las razones que las personas citan cuando
se les pregunta por qué comparten un determinado contenido es que es una manera
de apoyar causas que les preocupan o por
las que se sienten interesados.
De esta forma, las
obras sociales, casos de personas que necesitan ayuda, etc. tienden a ser
compartidas en redes sociales.
Otro tipo de altruismo viene derivado del hecho de que
la mayor parte de las personas manifiestan que las respuestas que los demás
aportan en redes, les ayudan a tomar decisiones sobre temas de su interés. De
ahí, que se den respuestas y comentarios
a los contenidos que han sido compartidos por los demás.
Hasta aquí algunas razones que hacen que las personas
compartan contenidos. Y ahora con esta información, ¿sabremos orientar nuestros
contenidos para conseguir que sean compartidos?