CONVERSIÓN IDEOLÓGICA A TRAVÉS DE GRUPOS

CONVERSIÓN IDEOLÓGICA A TRAVÉS DE GRUPOS

No cabe duda de que, para los individuos, la pertenencia a un grupo es muy importante. Y es el conseguir esa pertenencia, lo que hace que, en determinadas ocasiones, el sujeto abandone la opinión que tiene sobre un determinado tema, para aceptar la del grupo. Es lo que se denomina influencia social.

Esta influencia social es más frecuente de lo que parecería a priori. Y es que, como seres sociales, los juicios que expresa nuestro entorno nos afectan e influyen de distintas maneras y a través de diferentes factores.

Aunque a los seres humanos no nos gusta creer que nuestro comportamiento y nuestra forma de pensar está influido por la sociedad, la realidad es que esto sucede constantemente. Tanto cuando compramos un producto como cuando elegimos un hotel para nuestras vacaciones o cuando seleccionamos el programa de televisión que queremos ver, las opiniones de los demás nos influyen en gran medida. Y es que no hay que olvidar que somos seres sociales y en la relación con los demás, las influencias son inevitables.

 

¿CÓMO SE EJERCE LA INFLUENCIA SOCIAL?

Al hablar de influencia social, lo primero que viene a la mente es que la mayoría, el grupo mayor, va a ser el que ejerza la influencia sobre el individuo o el grupo de menor tamaño. Sin embargo, la influencia puede ser bidireccional y ser el individuo o el grupo más reducido de personas quien influya en el grupo mayoritario.

Atendiendo al tamaño del grupo, se denomina conformidad cuando es el grupo menor quien se une a la mayoría e innovación cuando el grupo mayor adopta las ideas u opiniones de la minoría.

 

ESTUDIOS SOBRE CONFORMIDAD

Se han realizado diferentes estudios para probar la conformidad. En alguno de ellos se hacen dos muestras de individuos. A la primera muestra se les presenta un estímulo, primero de forma individual y luego en grupo, mientras que con la segunda muestra se hace de forma contraria, primero se les presenta el estímulo en grupo y después de forma individual.

Los resultados muestran que, cuando el estímulo se presenta primero de forma individual, el sujeto se forma una opinión, y cuando se une al grupo, intenta conseguir una posición compartida con el resto.

Cuando el experimento se inicia con el estímulo en grupo, la opinión formada en el grupo se arrastra a la del individuo.

En la investigación se observa también que cuando el planteamiento del estímulo no es ni verdadero ni falso, los sujetos se dejan llevar por la opinión de los demás, pero lo sorprendente es que ante, por ejemplo, un estímulo que sea una afirmación errónea, los sujetos también aceptan la opinión del grupo incluso sabiendo que están equivocados. Es interesante observar que, pese a saber que los demás están equivocados, preferimos aceptar su opinión.

Otro experimento muy interesante consiste en identificar, entre tres líneas que se presentan juntas, cual es igual de larga que otra que se presenta separada. Cuando el sujeto está solo, la mayoría de las personas acierta, con un porcentaje de error del 0,7%. En cambio, cuando la decisión se toma en grupo, la tasa de error crece hasta el 37%. La razón, en este caso, es que parte de las personas del grupo son cómplices y dan una respuesta equivocada de forma intencionada. Lo sorprendente es que el grupo adopta esta respuesta, aunque en muchos casos intuyan que es errónea.

 

¿DE QUÉ DEPENDE LA CONFORMIDAD?

Una de las variables que más afectan es la del número de personas que forman el grupo. Si hay más personas ejerciendo presión, la influencia será mayor, pero eso sí, el aumento no es proporcional al número de individuos.

Otro factor que también tiene influencia es la presencia de un cómplice. Si hay un sujeto que dé su opinión antes que los demás y su opinión coincide con la del sujeto experimental, la conformidad con la opinión del grupo disminuye. Ese apoyo hace que la resistencia a aceptar la opinión del grupo aumente.

También las características de cada persona influyen. La confianza en uno mismo, lo competente que se percibe el sujeto en relación con los demás, etc. influyen en el nivel de conformidad.

 

INFLUENCIA NORMATIVA E INFORMATIVA

Los individuos, como seres sociales, estamos influidos por el entorno. De esta forma, las opiniones de los sujetos dependen, por una parte, de lo que percibe a través de los sentidos y por otra de lo que los demás opinan.

Cuando el sujeto acepta la opinión del grupo porque confía más en el criterio de los demás que en el suyo, estaríamos ante una influencia informativa. Por el contrario, cuando el individuo opina como el grupo porque quiere ser aceptado por él estaríamos ante una influencia normativa. Se trata de seguir la norma social para ser percibido positivamente.

El cambio que se produce en el sujeto, en cada tipo de influencia es diferente. En el caso de influencia informativa, el sujeto abandona su opinión y acepta la del grupo, por lo que el cambio no es solo de conducta interna sino también de pensamiento. Por el contrario, en el caso de influencia normativa, donde el sujeto pretende contentar al grupo, el cambio es solo de la conducta visible y su pensamiento seguirá siendo el mismo, su opinión interna no cambia.

En los dos casos existe conformidad, pero, en la influencia informativa, se considera que es de tipo privada porque existe un cambio interno. Este proceso se conoce con el nombre de conversión porque el sujeto convierte su opinión. La influencia normativa da lugar a una conformidad pública, puesto que solo modifica la conducta delante de los demás. Este proceso se conoce como sumisión. Se somete solo para gustar.